Hace poco recibí una invitación para probar Suse Studio, la nueva herramienta de Novell para crear distribuciones de GNU/Linux personalizadas. Tras probarla solo puedo decir que han hecho un trabajo impresionante, es sencilla de usar pero muy potente, incluso nos permite probar el resultado en sus propios servidores.
Veamos de forma detallada todo lo que ofrece Suse Studio:
Lo primero que vemos tras identificarnos en su web, donde nos permite definir las opciones más básicas de nuestra futura distribución. Empezando por cual sera la base (OpenSuse o Suse Enterprise), que arquitectura queremos (32bits o 64bits) y el nombre que tendrá nuestra distro.
El siguiente apartado será el de Software, donde elegiremos que programas llevará nuestra distribución. Para empezar podemos elegir que repositorios incluir, lo que nos permitirá incluso añadir software propietario (como los drivers de la tarjeta gráfica o flash player) o añadir software no soportado por Suse. Abajo encontramos varias categorías donde estarán clasificados todos lo paquetes disponibles para añadir o quitar de nuestra futura distribución, todo muy ordenado respecto a la popularidad de cada paquete.
Ahora nos tocara empezar con la configuración, lo primero es elegir el idioma, localización y definir las cuentas de usuario por defecto.
Lo siguiente el personalizar la estética, podemos cambiar tanto el logo de la distribución, como la imagen de fondo que veremos durante la instalación y al inicio una vez instalada.
Luego elegimos que tipo de inicio preferimos y escribimos una licencia de uso para nuestra distribución.
La siguiente opción nos permite configurar bases de datos MySQL por defecto, lo cual solo es útil si pensamos usar la distribución para montar un servidor.
Elegimos si se iniciara sesión automáticamente con un usuario, incluso nos da opción de configurar comandos o arrancar programas cuando determinado usuario se identifique.
Si vamos a usar la distribución virtualizada mediante Xen o VMware también nos permite configurar la RAM y el tamaño del disco virtual. Si usamos una copia de disco nos permite elegir el tamaño de la partición SWAP. En caso de crear la distribución como Live-CD no es necesario configurar nada.
Y por último, incluso nos permite introducir scripts que se ejecuten tras montar la distribución o durante el primer arranque. Permitiendo a los usuarios más avanzados personalizar totalmente el funcionamiento.
La siguiente pantalla nos da la opción de añadir archivos independientes de la instalación (manuales, vídeos, archivos extra, etc…). Pudiendo seleccionar en que directorios serán añadidos.
Bien, ya tenemos la distribución a nuestro gusto, solo queda crearla con la configuración que hemos elegido. En esta pantalla nos permite seleccionar que tipo en que tipo de medio vamos a usarla: Live CD, imagen de disco o virtualizada mediante Xen o VMware. También decidimos el número de versión que queremos asignarle (en el futuro podremos hacer otras versiones basadas en esta).
Una vez apretamos Build aparece una barra de progreso indicando el tiempo que necesitaran los servidores para crear nuestra distribución. En mis pruebas tardaron sobre 10 minutos, aunque dependerá de cuanto software hayamos elegido.
Y ahora viene lo que más me ha sorprendido, una vez terminado el proceso no solo podemos descargarla, también podemos probarla directamente en los servidores de Novell, impresionante…
Tras hacer pruebas con Suse Studio solo puedo decir una cosa, han hecho un gran trabajo. No solo es una herramienta sencilla de manejar, es muy potente y puede ser usada incluso para proyectos serios. Además, nos encontramos ante una versión en pruebas solo con invitaciones, por lo que todavía va a mejorar en los siguientes meses.
Quien podría imaginar hace una década algo similar, ser capaces de hacer un sistema operativo a medida desde nuestra casa, sin apenas conocimientos técnicos y de forma gratuita. En este tipo de proyectos es donde el software libre realmente cobra sentido.
